Tara Taylor Quinn - A la vuelta de la esquina

Crítica realizada por LILIAN

Libro 5 de la serie "Shelter Valley"

"Phillys Langford era amiga de todos, pero amante de nadie... Hasta que sucumbió a la inesperada tentación que supuso para ella Matt Sheffield, y poco después descubrió que se había quedado embarazada.
Matt era un tipo solitario que huía de compromisos como el amor o la familia. Y aunque Phillys insistía en que no quería ni necesitaba nada de él, por alguna razón, Matt no podía consentir que eso quedara así...
Por fin llegaron a un acuerdo por el que Matt ayudaría a Phyllis durante el embarazo, pero tal acuerdo fue implicando cada vez más compromisos... hasta llegar al mayor compromiso de todos: el matrimonio"

Ante esta sinopsis que narra más de lo que debería, intentaré hacer un pequeño resumen del argumento sin resultar pesada.

Phillys Langford es una persona muy independiente. Psicóloga de profesión, odia las complicaciones. Cuando en su camino aparece el profesor Matt Sheffield no puede resistirse y se queda embarazada. Desde el principio las cosas parecen estar muy claras entre ellos: Matt, con una infancia a salto de mata, no cree que pueda ser un buen padre y Phillys está feliz de ser madre soltera y sin ataduras. No sé ni cómo ni por qué, pero poco a poco Matt pasa ser una persona huraña a abrirle su corazón a Phillys y a su hijo...

Hacía tiempo que no me encontraba con un Harlequín con menos gracia que éste. Forma parte de una serie y se nota. Hay un batiburrillo de personajes secundarios que supongo que habrán protagonizado su propia historia, pero en ésta creo que sobran. El papel de las embarazadas amigas de Phillys (por cierto, vaya nombrecito tan romántico...) se reduce a un "pasan los días y miro cómo va creciendo mi barriga". Son tan sosas y aburridas, que parecen hechas de cartón piedra.

En la misma línea, está la relación que mantienen Phillys y Mark. No logran transmitir pasión ni en la escena hot necesaria para que llegue el embarazo. Sólo de pensarlo se me congelan hasta las pestañas. La enorme responsabilidad de Mark es poco creíble: o quieres un hijo o no lo quieres o vas evolucionando a lo largo de la novela del no al sí. Lo que no puede pretender la autora, es presentar a un personaje que tiene fobia a ser padre porque está convencido de que lo haría fatal y de golpe y porrazo, empezar a atosigar a la pobre madre con visitas y ofrecimientos. Una madre que insiste en que su maternidad sea en solitario, porque el padre de la criatura no quiere saber nada del niño. Pero que, por otra parte, es tan responsable (que cuando se ponen las cosas feas) la acompaña al médico y le pasa la aspiradora. Ya sé que estoy leyendo ficción, pero la novela no tiene ni pies ni cabeza. Es imposible pasar un buen rato cuando no puedes evitar que te chirríen los dientes en cada párrafo.

Mi puntuación es 1/5