Crítica realizada por Lady Macbeth
Tercera entrega de la serie “Cuatro Bodas”
De niñas lo compartieron todo. Con los años se han convertido en mujeres divertidas, sexis e independientes. Y han montado una empresa donde cada una pone lo mejor de sí para convertir una boda en el día perfecto. El éxito está asegurado si Parker se ocupa de la organización, Laurel del banquete, Mackensie de las fotos y Emmaline de las flores. Si alguien sabe cómo planear la mejor boda es este cuarteto de amigas. Aunque organizar varios enlaces a la semana no garantiza encontrar el amor, que siempre aparece cuando y donde menos lo esperas… como le acaba de suceder a Laurel McBane.
La única concesión al romanticismo en la vida de Laurel es ofrecer el remate perfecto a una celebración perfecta… creando el más perfecto de los pasteles de boda. En todo lo demás, ella antepone su sentido práctico y cierta actitud cautelosa. Aunque, cuando se va con tanto cuidado, se puede terminar caminando a tientas. Y darse de bruces con Delaney Brown, abogado de la empresa, hermano de una de sus socias, y el hombre más leal y encantador, pero también más exasperante, que haya conocido. ¿No es el momento de lanzarse y atreverse a probar una relación con la que, hasta ahora, Laurel solo podía soñar?
Como en las dos entregas anteriores, nos encontramos con una historia, sencilla, en la cual no hay una gran trama, ni nada especial ni destacable, tan solo una bonita historia de amor de dos personas que se conocen de toda la vida.
Es este caso, le toca el turno a Laurel, la repostera-pastelera de Votos. Así que Nora Roberts, nos da una clase magistal de los pasteles de boda típicos americanos, coberturas, diseños, rellenos…. Bueno, la boca se te hace agua. Nos describe a Laurel como una mujer de su tiempo, hecha a sí misma desde abajo, para nada soñadora y con los pies en la tierra. Siempre ha estado enamorada del hermano de su mejor amiga Parker, pero nunca se decidió a confesárselo ni a sus amigas y mucho menos a Del. Sin embargo le exaspera que Del no se fije en ella, o eso cree, y que la considere una más de “sus chicas” Votos. Hasta que un día harta de que siempre esté preocupándose por todo, ella para hacerle ver que no es como si fuera su hermana le besa. Del se queda sin palabras y no sabe cómo debe tomarse ese beso, y es ahí donde empieza la historia entre los dos. Del es abogado que tiene su propio bufete, un hombre bien posicionado, hijo de una familia rica, que cuando sus padres murieron en un accidente aéreo se hizo cargo de “la familia” y lo pongo entre comillas porque para él la familia no sólo es su hermana Parker, sino sus amigas Mac, Emma y Laurel. Hay algunas escenas muy divertidas cuando deciden salir juntos y probar a ver como les va. El trato que hacen es que durante el primer mes que salgan no se acostarán y eso genera unos diálogos divertidísimos entre los amigos haciendo una porra a ver cuánto aguantan. Como en los libros anteriores se le da mucha importancia a la amistad entre las cuatro, y también sale bastante Mal, el que será la pareja de Parker en el próximo y último libro. En cuanto a la relación de los protagonistas, aparte de ser muy bonita y romántica, lo más destacable es que ella siente dudas de que Del pueda estar enamorado de ella, ya que considera que Del es de un estatus social más alto que ella, por eso de tener tanto dinero…. Pero como siempre todo acaba fantásticamente bien, y aunque ya no me ha sorprendido tanto como los dos anteriores, sí debo confesar que los dos o tres días que tardé en leerlo me hizo sentirme bien y feliz.
Valoración: 7/10
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Crítica realizada por Tohko
Tercer libro de la serie “Cuatro Bodas”, es un libro que esperaba con gran expectación. Normalmente no soy muy fan de la series de Nora Roberts, me parecen bastante repetitivas y normalmente suelo tan solo sus libros independientes. Sin embargo, no he podido resistirme a esta serie protagonizada por cuatro mujeres guapas, sexys, independientes pero también vulnerables y con miedo al amor.
Este libro está protagonizado por una de mis protagonistas prefericas Laurel McBane. Laurel es la experta en la repostería de las bodas. En un evento así todos los detalles deben ser espectaculares desde la fotografía de Mac a las flores de Emma y Laurel no le va a la zaga. Sus creaciones son magníficas, originales y sobre todo acorte con cada pareja de novios. Laurel es una mujer independiente, se ha hecho a sí misma, ha tenido una educación dura con una familia desestructura debido a que sus padres tuvieron problemas con hacienda. Se ha esforzado por conseguir lo que quiere a pesar de los desprecios, las críticas y demás obstáculos. Por eso choca bastante con el ambiente en el que se mueve actualmente donde predominan las grandes familias ricas y poderosas de la sociedad de Greenwich.
Aquí podemos verla trabajar con los pasteles, las tartas, compenetrarse con sus compañeras, compartir momentos buenos y momentos malos y también momentos incómodos. Estos momentos incómodos llegan porque en la escena de su vida siempre ha estado Delaney Brown, el hermano mayor de Parker.
Delaney Brown es sin duda mi personaje favorito masculino. Guapo, sexy, amante apasionado y encantador, protector, cuidadoso y a la vez exasperante. Delenay es el hermano mayor de Parker, ambos perdieron a sus padres bastante jóvenes y desde entonces es el cabeza de familia. Ha cuidado de su hermana y sus amigas, a las que llama cariñosamente sus chicas y el Cuarteto; su forma de ser es la de ser protector, solucionar las cosas, ver las cosas de manera práctica y siempre en perspectiva. Choca con Laurel por razones obvias, ambos son bastante distintos y a la vez existe una química entre ambos que llegado el momento parece difícil de ignorar.
Laurel y Del después de que la química salte en una cocina rodeada de sabores dulces deciden iniciar una prueba para ver donde les lleva esa química. Durante treinta días ambos estarán en una moratoria y verán a donde les lleva su relación. Quizás esta parte resulta previsible pero aunque sea así la novela nos presenta a dos personajes distintos que se conocen de toda la vida y que se conocen demasiado bien en principio para que haya más que una mera atracción sexual.
Sin duda alguna esta es la novela que más me ha gustado de las tres que han salido. Y el mérito se debe a Delaney Brown. Dado que se le describe como un hombre de éxito, guapo, sexy, triunfador con las mujeres y además rico una puede pensar que será el típico prepotente a la que la protagonista femenina le descubre el mundo del amor y le demuestra el poder de este. Sin embargo, Del no es así, si es rico, guapo, sexy, triunfador pero es tierno, dulce, nada ególatra ni prepotente y como el mismo dice su trabajo consiste en encontrar soluciones y es su manera de ser y es el que encuentra la solución a su relación, es el que le demuestra a Laurel que no esta tan mal que alguien te cuide y que eso no implica ni venderse ni perder la independencia lograda con tanto esfuerzo.
No es un libro de grandes declaraciones de amor, al menos al principio, es un libro sobre alguien que te conoce tan bien como tu propio hermano puede convertirse en el gran amor de tu vida y como a pesar de conocerse de toda la vida aún quedan cosas por descubrir que están latentes y aparecen cuando menos te los esperas y hay que saber verlas.
Como digo para mí y a falta del último libro protagonizado por nuestra querida Parker Brown este es el mejor libro de la serie. Una combinación de carácter, ternura, sal, pimienta y la medida justa de dulce. Después de todo el libro se llama “Sabor a ti” y desde luego está lleno de sabores. Os recomiendo que probéis la combinación de sabores porque no os defraudará.
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Crítica realizada por Mary
Tercera entrega de «Cuatro bodas», la deliciosa serie de Nora Roberts. Ahora es el turno de Laurel: ¿logrará seducir al gran amor de su vida?
Son cuatro amigas inseparables. De niñas lo compartieron todo, y ahora también comparten negocio. Cada una de ellas está especializada en un aspecto de su actividad: organizar las bodas más sonadas, originales y glamurosas que pueda imaginarse. Y la verdad es que tienen mucho éxito, aunque de sus vidas sentimentales no pueda decirse lo mismo.
En esta entrega, Laurel —la chef de la empresa— acaba descubriendo que está enamorada de Del Brown, amigo de la infancia y hermano del abogado de la casa. Desde luego, ella no piensa reconocerlo, y él ni siquiera se ha dado cuenta, hasta que un día, en plena discusión, ella le planta un beso. Al cabo de unos días será él quien contraataque: no solo le devolverá el beso sino que, en el colmo del atrevimiento, ¡secuestrará sus zapatos preferidos!
Como ya hay dos críticas perfectamente realizadas, daré una pequeña crítica según lo que me pareció el libro.
En primer lugar he de decir que esta serie me ha enganchado desde el primer libro, pero reconozco que este era el que más ganas tenía de leer, no se porque Laurel era mi preferida y su historia con un amor "imposible" me tenía fascinada.
Esta novela se me ha hecho amena empiezas a leer y cuando te quieres dar cuenta ya vas cien páginas de mínimo, y esto se debe a la gran maestría de Nora a la hora de escribir. Por otra parte no se si es por mis espéctativas, pero no llegó a lo que había esperado, es verdad que es una novela recomendable y esta bastante bien, es entretenida, picante , dulce y donde los sueños se hacen realidad, por eso no entiendo porque no ha sido lo que esperaba.
Para mí gusto a faltado un poco de dificultad, desde el principio todo va como la seda, yo pensaba que Laurel lo iba a tener un poco más difícil y que todo iba a ser una conquista, pero no ha sido así.
Lo único fueron los temosres de Laurel debido a su pasado, que por lo menos le pusieron más emotividad a la novela. Por otra parte y que conste que adoro Nora, últimamente noto que todas las novelas son muy parecidas entre sí, y las series siguen un mismo boceto e historias, solo cambia un poco la circunstancia y ya esta.
Con esto no quiero decir que no la recomiendo porque vale la pena, pero eso sí para mí es un libo más con el que disfrutar, no es una joyita ni mucho menos por lo menos en mi opinión.
Valoración: buena
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Crítica realizada por Malory
Tenía muchas ganas de leer esta tercera novela de la serie "Cuatro bodas", la historia de Laurel y del prometía ser interesante. Pero por el omento ha sido la que menos me ha gustado, quizás porque había depositado en ella grandes esperanzas, imaginando una relación marcada por las discusiones, los tira y afloja y las indecisiones, dado que se conocen de siempre y ella para él es como una hermana, una de "sus chicas" y teniendo en cuenta el fuerte carácter de ella me ilusioné esperando una historia dónde saltaran chispas cada vez que tuviera lugar un encuentro entre ellos.
Pero por desgracia no ha sido así; no sé si tendrá que ver la anterior novela que he leído, donde la pasión se desbordaba y los sentimientos eran muy intensos, puede que por eso esta novela de Roberts me merezca, puede que injustamente, el calificativo de floja.
Puede que Ana Iturgaiz tenga razón y cada novela tenga su momento para ser leída, y está claro que este no era el momento de "Sabor a ti".
Me ha resultado todo demasiado sencillo y soso. La cosa surge desde el primer instante y tan solo tras un pequeño e insípido "juego" de voluntades arranca la relación. Obteniendo como resultado una historia un tanto almibarada y sin sobresaltos que me ha sabido a poco.
Esperaba bastante más de la pareja,. Ella apenas ha sacado su terco carácter a relucir, y en las ocasiones que lo ha hecho, no ha tenido mayores consecuencias. Y Del, al que erróneamente había imaginado como un don Juan empedernido y algo dominante respecto a "sus chicas", ha resultado ser un hombre dulce y comprensivo que tampoco ha sabido aportar emoción a la historia.
Estupendamente escrita, aunque sin chispa, puede que en otra oportunidad me hubiera resultado tierna y entretenida, pero por uno u otro motivo no ha sido así.
Me ha parecido aburrido tener que volver a leer una y otra vez (lo mismo en las dos anteriores) sobre reuniones, presentaciones, pruebas y organización de bodas, eso es siempre lo mismo y además la autora parece recrearse en ello y tras tres novelas casi me siento capacitada para organizar, yo misma, es tipo de eventos... resulta un poco pesado.
Tampoco me agrada la poca independencia que tiene el grupo y resulta hasta un poco irreal. Cuatro mujeres que trabajan juntas, son amigas de toda la vida, viven en la misma finca y comparten todo y ahora se van uniendo los chicos; todo muy idílico y perfecto, pero me pregunto ¿ninguno de ellos se cansa de estar pegado día y anoche a la misma gente por muy amigos que sean? Si parece que no se separan ni para hacer "pis".
A mí, me sacaría de quicio y es uno de los motivos por los que las tramas son tan idénticas, todo trascurre en el mismo lugar con la misma gente...
Solo espero que la cuarta novela, la historia de Parker y Mal, sea mejor. También esperaba mucho de ella, pero ya no quiero hacerme ilusiones, tendré que esperar a leerla para ver que pasa.
En resumen, esta es, para mí, la novela más sosa que he leído de Nora R. hasta el momento.
valoración: 2/5
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