Stephanie Laurens - Todo sobre el amor

Crítica realizada por Malory

6º de los Cynster

Solo hay una cosa que le guste más a Lucifer Cynster que seducir a una mujer; seducir a una mujer que se le resista, y más aún si es una mujer virginal e inexperta como Phyllida Tallent, de quien no se explica por qué le está costando tanto hacerla caer rendida a sus encantos. Pero, aunque apenas logra evitar ser arrastrada por los deseos que él le provoca, Phyllida debe mantener a toda costa su secreto, aquel que le impide consumar la pasión que los está devorando a ambos.

Este es el sexto libro de la saga Cynster y en mi opinión el mejor, aunque con ello no quiero decir que sea un libro de diez, ni que vaya a pasar a formar parte de mis inolvidables.

Para empezar tengo que decir que la sinopsis no me cuadra mucho con la realidad de la novela, lo primero porque Alasdair (Lucifer), como buen Cynster, no persigue a damas inocentes e inexpertas, más bien todo lo contrario, huye del compromiso por lo que también evita a ese tipo de mujeres. Hasta que conoce a Phyllida, claro está.

Por otra parte nos menciona un gran secreto que les impide consumar su pasión... sí, hay secreto, y creo que es el único punto en el que flaquea el argumento, la chica le da demasiada importancia a una promesa que ha hecho y con ello lo único que hace es confundir a Lucifer, haciéndole creer que sabe más de lo que cuenta sobre el crimen que está tratando de resolver, pero que yo recuerde no les impide consumar nada.

Partiendo de esta base, vuelvo a decir que me ha parecido el mejor de toda la saga. En primer lugar porque la historia me ha resultado mucho más interesante que las demás y bien hilada, consiguiendo mantenerme intrigada y atenta hasta el final. Me ha resultado mucho más ligero que otros de esta autora, que siempre recarga sus textos con interminables descripciones, estupendamente escritas, pero agotadoras. En esta obra todo es mucho más fluido, resultando mucho menos pesada.

Los protagonistas me has gustado. Él es un Cynster de los pies a la cabeza, atento, caballeroso, dominante y sobreprotector, pero se encuentra con la horma de su zapato, ya que la chica no es ninguna mojigata, al contrario, a sus veinticuatro años está encantada con su soltería que le propina independencia y libertad de movimientos. Decidida y segura de sí misma, sabe apañárselas muy bien ella sola y le encanta cuidar y preocuparse por todo el mundo; por esto, precisamente, chocarán estos dos... son iguales.

Los misterios, los intentos de asesinato y la apasionada historia de amor que surge entre los protas, hacen de esta novela una historia estupenda para pasar un buen rato. Lucifer me ha resultado encantador (más que la mayoría de sus primos) y ella también me ha gustado mucho más que otras de las protagonistas de la saga.

Incluso en esta ocasión, las escenas hot (que son varias, como siempre) no se hacen eternas y cansinas. Lo que sigo preguntándome es de dónde saca esta mujer los nombres para sus chicas... que horror, por favor.

En resumen, una novela recomendable, siempre y cuando esta autora te atraiga mínimamente.

Mi valoración: 3/5