Anna Godbersen - Rivales

Crítica realizada por Malory

A diferencia de lo que se podría pensar al leer la sinopsis, en esta historia son cuatro y no dos las "protagonistas".
Por un lado, un poco en segundo plano, está la desaparecida Elizabeth Holland, prometida a Henry Schoonmaker, pero enamorada de otro hombre.
Penélope Hayes, amiga de la primera, que no dudará en emplear todos los medios a su alcance para conseguir su objetivo, Henry.
Otra pieza importante de la trama es Diana Holland, hermana menor de Elizabeth y también enamorada de Henry.
Y por último, una mujer que jugará un papel decisivo en toda la trama, a pesar de que su propia historia es también secundaria, Carolina. La antigua criada de Elizabeth Holland. Una joven ambiciosa y que aspira a ser una gran dama, a pesar de su humilde nacimiento.
Serán estas cuatro jóvenes y sus historias, las que marquen el ritmo de la novela y el desarrollo de la trama, aunque realmente no serán ellas, sino las estrictas normas sociales que rigen la buena sociedad neoyorkina de 1899 las que darán foma a la novela.
No me ha parecido una historia emocionante, como cabría esperar. Ni hay grandes enfrentamientos entre las "rivales". En esta obra todo se hace bajo manga, desde las sombras o por mediación de la prensa, que se encarga de mantener a todos en su lugar, ya que cualquier salida de tono pronto salta a las páginas de los diarios y es motivo de escándalo. Algo impensable en aquella época y en una sociedad elitista, estricta e intolerante con los deslices, y por ello sus miembros deben permanecer practicamente impasibles ante los sucesos que les rodean y acontecen. Una simple mirada fuera de tono y el escándalo está servido.

Bien escrita, de lectura amena y relajada, no te lleva a emocionarte hasta el final. Tan solo te deja mantener la esperanza de que las cosas sucedan como deseas o esperas. Casi como a los protagonistas, que ven como sus sueños se rompen o se realizan casi sin poder evitarlo.
Tan solo dos de estas muchachas lograran sus objetivos y será gracias a su arrojo, decisión y a saber jugar adecuadamente las escasas cartas que el destino les ha brindado.

El desenlace me ha dejado muda de sorpresa. Y no añado más para no estropearselo a nadie.

Los personajes estan muy bien definidos, todos tienen unas personalidades muy diferentes a pesar de que cara a la galeria deben comportarse de forma muy similar, sino idéntica.
Cuenta con buenas y detalladas descripciones, que no resultan cansinas y que permiten hacerse una idea clara del ambiente y del vestuario de los personajes.

Seguramente habría mucho más que decir de esta novela, pero me ha dejado tan descolocada que no me salen las palabras. No puede decir que no me halla gustado, pero tampoco es el estilo de novela que prefiero.
De todas formas, para las amantes de la novela sentimental, seguro que es una buena historia.
Para mí ha sido diferente... y triste.

Mi valoración: 3,5/5