Crítica realizada por Mariam
La mudanza de Brandi Michaels a Chicago no podría haber sido más accidentada y estar repleta de problemas de última hora: un apartamento helado, la calefacción averiada, muebles que no se corresponden con los escogidos … su prometido que viaja a las Vegas para casarse con su otra novia embarazada … En fin , se podría decir que es algo complicado.
Tras obtener trabajo en una prestigiosa firma de abogados de la ciudad, y al residir allí Alan, su novio, la suerte parecía sonreír a Brandi. Todo es perfecto. En apariencia.
Pero tras la debacle emocional en la que la boda de su prometido la deja sumida, se deja llevar por un incontrolado impulso y, cuando Alan la telefonea para exigirle que el devuelva el anillo de compromiso, se dirige a una tienda de empeño, en la que se deshace de dicha joya.
La venganza queda completada cuando además de adquirir unos elegantes pendientes de zafiros, utiliza el resto del dinero en una visita a las boutiques más exclusivas, manicura, peluquería… Todo este ajetreo esconde un objetivo: ha decidido que esa misma noche acudirá a la cena benéfica de su tío Charles McGrath , uno de los socios del gabinete, seducirá a un hombre y pasará con él la noche más memorable de su vida, algo que jamás antes ha vivido.
Sus planes parecen salir a la perfección. Su espectacular aspecto despierta el interés de infinidad de hombres apenas cruza el umbral de la mansión de McGrath, y pese a que inicialmente no encuentra al candidato ideal que cumpla todos sus requisitos, finalmente descubre al hombre perfecto: Roberto Bartolini.
El Conde Bartolini, como se le conoce en los más exclusivos círculos, resulta ser un hombre apasionante. No sólo posee un gran atractivo, está rodeado de un halo de leyenda y un misterioso pasado, sino que junto a él pasa la noche más increíble de su vida.
En realidad la noche se acaba convirtiendo en un fin de semana. Algo que debería poner un punto y final a la aventura, mas no es así.
Roberto Bartolini es considerado un ladrón, que perfectamente podría llamarse de guante blanco, ya que se le atribuyen los robos más renombrados de las joyas más impactantes y costosas. Es un hombre que no busca ataduras de ninguna clase y … casualmente es el primer cliente de Brandi en el bufete de abogados, algo que ella descubre más tarde.
Ese mismo fin de semana, al regresar a su apartamento descubre que ha sido víctima de un acto vandálico. El lugar está patas arriba y completamente destrozado.
Las sorpresa no podría ser mayor para Brandi, que tras el desastre que la aguarda en su nuevo apartamento, se topa con su amante de fin de semana para que lo defienda en una acusación de robo.
La llegada a un nuevo trabajo -envuelta con las típicas rencillas y desconfianzas que esto suscita- sumado a su aspecto sumamente atractivo en la fiesta benéfica, que la tacha de mujer ligera de cascos ante el resto de compañeros del gabinete, más el hecho de tener que defender al hombre al que se supone no va a ver más, se conjugan en su contra.
Pero si pareciera que la situación no podría ser aún peor, los acontecimientos posteriores se encargan de desmentirlo. Además de ser su abogada, el juez deja la custodia de Bartolini en sus manos cuando éste le insulta en las cortes. Como resultado: Brandi no puede perder de vista a Roberto ni un solo minuto hasta la llegada de su juicio. Deben estar juntos día y noche.
Brandi en realidad desea dejar atrás ese episodio de su vida, unos momentos que le han mostrado una nueva faceta de su personalidad, una que nunca ha mostrado a nadie. Una que, pese a que la sorprende gratamente, también la incomoda. La impuesta presencia de Roberto en su vida le imposibilita hacerlo, mas aun cuando los recuerdos de esos dos días se agolpan sin cesar en su cabeza.
Roberto, en cambio, planea aprovechar la ocasión para que la experiencia vivida junto a Brandi vuelva a repetirse. Claro que para ello tendrá que lidiar con varios elementos: la fría distancia impuesta por Brandi, la relación cliente-abogada entre ellos y la presencia de unos hombres dispuestos a acabar con su vida, eso sin dejar de lado que el mismo Roberto es el objetivo de un familia de mafiosos italianos dispuestos a engatusarlo para que cometa el robo jamás imaginado: el brillante Romanov.
En medio de toda esta charada, en la que Roberto y Brandi se ven envueltos, ambos deben descubrir la profundidad de sus sentimientos y actuar en consecuencia. Lo sucedido entre ellos, ¿fue una aventura casual de fin de semana o … puede ser algo más duradero? ¿Pueden un ladrón y una estricta abogada enamorarse?
Trouble in high heels es una novela contemporánea de Christina Dodd que entremezcla el suspense y el romance, y con punzadas de humor, nos ofrece un libro interesante, fresco y de lectura ágil.
La narración es muy fluida, ya que la abundancia de diálogos aligera mucho la secuencia de la trama. Además el contenido de estos diálogos muestra tal ingenio y, en ocasiones, sarcasmo que hace muy amena la lectura del libro.
Sin dejar de lado las descripciones detalladas y bastante minuciosas del entorno de Chicago, las calles, los personajes y la ambientación de intriga y suspense que predomina.
El personaje de Brandi es el de una mujer que en ocasiones puede resultar algo arisca y fría. La manera distante con que intenta tratar a Roberto, puede resultar un tanto molesta. Sin embargo, es bastante evidente que su frialdad no es más que una coraza creada por ella misma para protegerse.
Roberto Bartolini es un hombre que oculta un secreto, el que le ha conducido al punto exacto en que se encuentra: ser el principal sospechoso de un robo.Su pasado se nos va desvelando poco a poco a lo largo de la novela. Sin embargo, su carácter un tanto arrogante, su seguridad en sí mismo y su inconmensurable atractivo nos son patentes desde sus primeras intervenciones. Poco a poco él también debe afrontar una nueva faceta de él mismo: la vulnerabilidad que despierta en él Brandi y la dificultad que tiene para expresar sus sentimientos.
El resto de personajes secundarios aportan mucha fluidez e interés a la trama. Desde el personaje de Tiffany, la madre de Brandi, cuya difícil relación entre ambas vamos entendiendo a medida que avanzamos en la lectura, Sergio “nonno” -el abuelo de Roberto- Charles McGrath, Alan… y la hermana de Brandi -Kim- un personaje que pese a sus breves apariciones es muy interesante por su carácter y porque introduce en la trama una relación lesbiana, algo con lo que al menos yo no me he encontrado mucho.
Como resultado nos encontramos con una novela divertida e intensa, en la que Christina Dodd crea una ambientación en la que entremezcla un ambiente mafioso, a los ladrones de guante blanco, el romance, e incluso, el humor.
Las personalidades no sólo la de los protagonistas, sino también la de los secundarios, confluyen en infinidad de situaciones sensuales, emotivas, divertidas y de tensión.
Trouble in high heels es una novela romántica contemporánea, en la que se entremezclan una historia de amor intensa, envuelta de misterio y peligro y una trama de suspense y acción. Es un libro que hace que fácilmente te sumerjas en su lectura, pese a que durante las primeras páginas da la sensación de tratarse de una novela con mayor carga dramática. Como puntos negativos a señalar, destacar que las primeras páginas se hacen un tanto densas hasta el encuentro de Roberto y Brandi, ya que la ausencia del protagonista no permite que la trama romántica se inicie. Sin embargo, una vez ésta se inicia, la novela es muy interesante hasta sus últimas páginas. Además ofrece escenas sensuales y otras muy divertidas, algo muy de agradecer.
Valoración: Bueno
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