Eva Ibbotson - Una canción para el verano

Crítica realizada por Anasy

Para sorpresa y desencanto de su madre y sus tías, feministas recalcitrantes, Ellen decide marchar a Austria para trabajar como gobernanta en la Escuela de Música, teatro y Danza de Hallendorf. Pronto su encanto y dulzura conquistan los corazones de los estudiantes, ávidos de cariño, así como de los excéntricos profesores. Allí Ellen conoce a Marek, un singular individuo que se dedica a hacer trabajos varios en el internado. No tarda mucho en surgir la pasión entre ambos, pero Marek no es lo que parece. En realidad se trata de un renombrado compositor checo opuesto al régimen antisemita que ruge en Austria. Las sombras de la guerra se ciernen sobre ellos, y Ellen y Marek se ven obligados a separarse...

OPINIÓN PERSONAL:

Una Canción para el verano es el tercer libro de la autora que me leo , El regreso de un nuevo amanecer y la Danza del amor, los leí hace ya algunos años y el segundo me dejó buen sabor de boca así que al ver este libro de la misma autora me lancé a leerlo. No sé muy bien que me ha parecido, por una parte me gusta pero por otra tiene muchos sin sabores a lo largo de la historia que me han parecido innecesarios.

Cuenta la historia de Ellen, una joven londinense hija y sobrina de unas sufragistas muy progresistas siempre dispuestas a manifestaciones a favor de los derechos de la mujer, todas tienen profesiones destacadas para ser mujeres y esperan de Ellen el mismo futuro, sin embargo ya desde pequeña Ellen da muestras de que su vocación tira más hacia el lado hogareño y culinario que a conseguir una carrera destacada , por lo que cuando crece nadie se sorprende de que pese a su juventud termine siendo la gobernanta de un internado en Austria.

Hitler ya está en el poder de Alemania y la amenaza de una nueva guerra ya es casi un hecho cuando Ellen llega al castillo donde empezará una nueva etapa de su vida. El internado es peculiar, como peculiar son las actividades que allí se enseñan y el profesorado que las lleva a cabo. Ellen en seguida se hace con el castillo que necesita urgentemente la mano de una joven dispuesta y trabajadora con grandes dotes de organización y su llegada es como una bendición para todos, sobre todo para los niños que habitan en el internado, tan necesitados de atención y cariño. Pero el miembro más destacado y el más misterioso es Marek, un hombre que arregla todo, encuentra todo , pero que en realidad nadie sabe quien es.

El libro cuenta la historia de estos dos personajes pero no se centra sólo en ellos pues todos los que habitan a su alrededor tienen una parte importante en la historia, desde la pequeña y necesitada Sophie, el repelente Leon, el director del internado, y un sinfín de personajes que tienen su hueco en el libro.

La historia no sólo cuenta el avance de Ellen en Austria o las actividades clandestinas del misterioso Marek, la guerra avanza y será parte de esta trama donde los dos protagonistas, pese a atraerse desde el principio, tendrán que superar demasiados baches y el paso del tiempo para poder ser felices.

Y son estos baches y el tiempo que pasa lo que me deja un regusto un poco amargo en este libro de narración lenta y descriptiva , pero que aún así consiguió engancharme a pesar de que se pare en la vida de cada personaje que toca . Pero en la relación de Marek y Ellen me ha faltado ese algo especial entre dos personas que se quieren, sobre todo por parte de Marek que no han conseguir convencerme, los dos bailan uno al rededor del otro durante toda la historia sin llegar a intimar profundamente, y muchos de los obstáculos que ponen ya casi al final del libro me han parecido que eran un hacer sufrir porque si, sin motivo.

Pero en general, es un libro para leer con calma y sin prisas, con una narración bonita y muchos personajes pintorescos, además tiene un punto muy simpático en la primera mitad del libro que te hace soltar alguna que otra risilla, no es lo que esperaba y algo si que me ha decepcionado en la última mitad del libro, pero no es para nada una mala historia.

Bueno.