Crítica realizada por Maddy
Título: La llama y la flor
Autora: Kathleen Woodiwiss
Género o Época: Historico
Protagonistas: Heather y Brandon Birmingham
Saga: Birmingham
Tras quedarse huérfana, Heather es acogida en casa de sus tíos, dos personas mezquinas que la tratan más como una sirvienta que como parte de la familia. En una de las ocasiones en las que su tía la manda a Londres a casa de su hermano, éste intenta violarla. Al defenderse, provoca que el caballero quede gravemente herido. Esta situación desencadena la huída de la propia Heather por las calles de Londres en plena noche.
Brandon Birmingham, un joven capitán norteamericano acaba de atracar en el puerto de Londres, tras varios meses de larga travesía, ha llegado la hora de la juerga y la diversión. Dejándose llevar por sus necesidades más bajas, le da instrucciones a uno de sus empleados para que le consiga una prostituta.
La casualidad hace que el criado de Brandon se tropiece con Heather en las calles cercanas al puerto, la oscuridad, y las altas horas de la noche en la que se produce el encuentro provocan que el pobre hombre piense que la muchacha es una mujer de la calle. Sin atender a sus protestas la lleva hasta el barco de su señor.
Una vez allí, el alcohol ya ha sufrido bastante estragos entre la tripulación. En el estado de embriaguez en el que se encuentra Brandon no le permite discernir si las quejas de la muchacha son ciertas o no, él tan solo quiere una mujer y esa esta allí, pues bien, habrá que aprovechar la ocasión. Sin muchas contemplaciones la hace suya. A la mañana siguiente, se descubrirá todo el malentendido, pero la muchacha ha conseguido escapar.
Aunque el joven capitán no se la pueda quitar de la cabeza, no será hasta meses más tarde cuando tendrá noticias de la muchacha, para su sorpresa, ella está en embarazada.
Una de las primeras novelas que leí del género romántico, y porque no decirlo, también una de mis favoritas. Aunque en un primer momento el argumento nos parezca un poco “fuerte”, debemos tener en cuenta la época en la que se encuentra basado el libro y todos los elementos que rodean la situación.
El personaje de Heather me ha parecido el de una mujer de apariencia frágil, pero que en realidad sabe adaptarse a cada situación con una facilidad y sensatez elogiables, la vida no le ha deparado hasta el momento situaciones nada agradables, pero cuando el destino la une irremediablemente a Brandon Birmingham, el apuesto capitán que abuso de ella, es capaz de darle una oportunidad. Tras varios meses de convivencia atravesando el ancho océano hasta Norteamérica, descubrirán un hombre fuerte, sensato, responsable, y arrepentido por el trato que le infringió en su día. Por primera vez en su vida se sentirá protegida. No podrá evitar abrirle su corazón.
Brandon tampoco quedará inmune a los encantos de la pequeña morena, a su lado encontrará a una mujer bondadosa, dulce, con un corazón de oro que no duda en defender lo suyo y a los suyos. Una vez que nazca el bebe, todos esos sentimientos se unirán al orgullo de ser padre. En esos momentos puede asegurar que tiene todo lo que quiere en la vida. Pero nunca nadie ha dicho que es perfecta, una sombra del pasado aparecerá para truncar su recién encontrada felicidad marital.
Mi puntuación: un nueve y medio (sobre 10)
Crítica realizada por Katon
Por fin he podido leer este clásico de la novela romántica. Reconozco que no entendía cómo narrando una violación se había convertido en el libro favorito para muchas lectoras. Ahora lo entiendo. Y todo es gracias a la magnífica pluma de Kathleen Woodiwiss. Eso es entrar en la novela por la puerta grande. Qué maravilla de libro.
Heather es una joven que tras la muerte de su adorado padre se traslada al campo a vivir con sus horribles tíos, porque es tan horrible su odiosa tía por maltratarla y hacerla trabajar como una esclava, como su tío, que lo consiente todo y prefiere callarse a evitar otra injusticia con su sobrina. Heather tiene la libertad al alcance de la mano; el hermano de su tía quiere llevarla a Londres para que trabaje en una academia. Lo que no esperaba es que la vistiera con el vestido más bonito que había visto en su vida y tratara de abusar de ella después. En medio del forcejeo Heather lo hiere y lo cree muerto.
Deambulando por el muelle de Londres, aterida de frío y con el impacto de haber matado a un hombre casi no se queja cuando dos marineros la hacen subir a un barco donde su capitán espera a una prostituta. Brandon Birmingham, el capitán americano no cree a la muchacha cuando le dice que no es una prostituta, pero ¿qué otra cosa podía ser vestida así, y paseando por los muelles? Cuando se da cuenta y la cree ya es demasiado tarde. Brandon empieza a idear mantenerla como una querida mientras esté en Londres. Pero a la primera oportunidad, Heather escapa del barco.
De vuelta con sus crueles tíos, Heather intentará olvidar esa fatídica noche, hasta que pocos meses después su tía ve la evidencia de esa noche en su vientre. Acudiendo a un amigo del padre de la joven, conseguirán que ese arrogante americano se case con la joven. La partida del barco está planificada para unos días después. Así que en poco tiempo Heather deberá abandonar todo lo que conoce y poner rumbo a las Carolinas. Pero las idas y venidas de su marido en la pensión donde se hospedan asustarán más a la joven. Heather temerá y echará en falta a su marido a partes iguales.
Brandon debería estar furioso por lo que le han obligado a hacer, pero sabe que es pago justo por haber forzado a la joven y por dejarla embarazada. Ahora son un matrimonio que apenas se conoce. La travesía hasta América puede ser muy larga. Las dudas, los miedos, la preocupación y el no saber lo que piensa el otro provocarán más de un malentendido. Pero cuando Heather cae enferma, Brandon será el primero en estar a su lado, cuidándola y atendiéndola como si su propia vida dependiera de ello. Ya en Charleston, Heather y Brandon no podrán relajarse, los peligros los acechan más próximos de lo que podrían imaginar.
Varias muertes animarán la trama final de la novela, aunque para mí la verdadera evolución de los personajes tiene lugar en el barco. Heather pasa de ser una jovencita inocente a una mujer, tímida y asustadiza al principio, pero fuerte y decidida cuando hace falta. Me ha gustado Heather, debe aprender muchas cosas pero con la paciencia de Brandon y la ayuda de Hatti no tardará en convertirse, por derecho, en la señora de la casa. Brandon, es complicado definir brevemente a este personaje. Al principio puedes llegar a odiarlo; por su comportamiento, por su arrogancia, por lo que le hace a Heather, pero en cuanto la autora nos deja ver su otro lado; cómo trata a sus hombres, cómo se toma en serio su responsabilidad dentro del barco, cómo trata a Heather después de su matrimonio, cómo intenta hacer que confíe en él, cómo se ocupa de ella cuando cae gravemente enferma. Para mí todo ese comportamiento, y muchos más detalles que no he contado consiguen que la escena tan cruda que se relata al comienzo quede a un lado.
Los personajes secundarios son el complemento perfecto, desde Jeff, el hermano de Brandon y quien apoya a Heather desde el principio, a Hatti, la criada de Brandon y quien lleva la casa con mano firme, le contará a Heather todo lo que debe saber sobre los Birmingham. La ambientación está muy cuidada, sin abusar de las descripciones, he podido imaginar las calles de Charleston, el paisaje de Carolina, la casa de la plantación y hogar de los Birmingham.
Coincido con todas aquellas que consideran esta novela una lectura imprescindible para la lectora de novela romántica.
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