Kristin Harmel - El arte de besar en la boca

Crítica realizada por Kkekka

¡Emma Sullivan al fin está en París! Sería algo maravilloso si no fuera por el hecho de que se siente atrapada en su trabajo de relaciones públicas de una de las más atractivas (y locas) estrellas del rock. El encargado de que las cosas empeoren es Gabriel Francoeur, un periodista sexi y testarudo que busca la cara más escabrosa de su cliente.

Pero si una mujer no puede reinventarse a sí misma en París, ¿dónde lo hará? Es el momento de dejar atrás a la antigua Emma Sullivan y de convertirse en alguien valiente, fascinante y con éxito. La clase de chica que no tiembla ante un beso en la boca.

Emma lleva tres años con su novio y está planeando su boda, pero un día este le dice que todo se ha terminado y además se encuentra con que en el trabajo deciden prescindir de sus servicios. De la noche a la mañana ve que su vida se dirige a un lugar del que ella no sabe muy bien la dirección. Pero como caída del cielo aparece su amiga Poppy que le llama pidiendo su ayuda.

Poppy es la relaciones públicas de una estrella emergente de la música un tanto problemático. Su socia la ha dejado plantada así que decide que es un buen momento para que su amiga Emma se traslade a París y la ayude con ese pequeño problema. Eso sería bueno para las dos, una necesita una socia y la otra superar un desengaño amoroso. Y todo el mundo sabe que no hay mejor sitio para eso que la ciudad del amor. Además, según Poppy nadie besa mejor que un francés.

En la ciudad de la luz, Emma se encontrará con una nueva vida llena de locuras, careras, citas con diferentes hombres, teorías más o menos peregrinas sobre la manera de superar su situación y un enigmático periodista que hará que le tiemblen las piernas.

Este es el segundo libro que leo de la autora y me ha gustado tanto o más que el primero. Su lectura el ágil y divertida (apenas tardé un par de días y son casi 300 páginas). Tiene mucho humor escondido entre sus líneas, muchas situaciones cómicas, pero es un humor muy blanco nada histriónico ni extremo.

Sus personajes gustan y son amables para el lector, no excesivamente profundos, pero si creíbles. Yo desde luego no le diría que no al periodista, lo tengo claro. Guillaume, la estrella del rock, es una parodia de todos estos artistas que van por ahí haciendo locuras, pero en su caso es como un niño grande que hace travesuras sin pensar en más. Es como un gran angelote con alma de diablillo que se dedica a hacérselas pasar canutas a la protagonista.

Emma es la continua duda. La mujer que ha sido abandonada pero que aún no sabe si debería perdonar y que tampoco sabe si la volverán a hacer daño. Tiene un gran sentido del deber y de la amistad. Y lo que es peor es tremendamente miope en lo que a los sentimientos se refiere. Y Poppy es la mejor amiga, el Pepito Grillo, la conciencia, la chispa.

Gabe, es periodista de espectáculos que cubre los eventos musicales y que él solito puede hacer que un cantante triunfe o se hunda para siempre. Es tenaz, intimidante, sexy, atractivo y se fija desde un principio en Emma y en cómo lleva los "asuntos" de su cliente. Está claro que oculta algo con respecto a Guillaume, además de la relación que parece surgir entre Emma y él, pero es un profesional.

El libro es un chick-lit en toda regla con sus cosas buenas y sus cosas malas (finales de película incluidos), pero es de lo más decente o aceptable del género que he leído últimamente. Desde luego la autora se va afianzando dentro de mis preferidas del género.

Lo recomiendo para las seguidoras del Chick-lit y todas aquellas que busquen un libro ameno y divertido al que no tengan que buscar demasiado sentido ni darle muchas vueltas. Esto también viene bien de vez en cuando.

Mi puntuación es de 4/5

Confieso que no soy muy fan del chick-lit y leo muy pocos libros de este género, pero el argumento de este libro me llamó la atención desde que salió por lo que estaba deseando leerlo, lamentablemente, no era lo que me esperaba.

Emma es una joven que aparentemente lo tenía todo, un prometido guapo y con una carrera de éxito, una casa que comparten y un buen trabajo, hasta el día en que su prometido Brett le dice que es mejor cancelar la boda y que la deja porque ya no la quiere, de paso también le dice que abandone la casa en cuanto pueda. Para empeorar las cosas la despiden de su trabajo al día siguiente de su ruptura con Brett. La vida de Emma se convierta de la noche a la mañana en una pesadilla, y ¿cuenta Emma con el apoyo de su familia y sus amigas? Para nada. Por eso cuando habla con Poppy, una amiga inglesa que actualmente vive en París  y le ofrece el empleo de relaciones públicas de una de las estrellas de moda en Francia, no se lo piensa y se marcha a París durante unas semanas.

En París y con la supuesta ayuda de Poppy, Emma tratará de superar su ruptura con Brett y el mejor consejo que le ofrece Poppy, una experta en la materia gracias a los cientos de libros de autoayuda que tiene en su salón, es ligar con todos los franceses que pueda y dejarlos plantados antes de que ellos lo hagan.

A parte de eso uno de los mayores quebraderos de cabeza de Emma será  la estrella para la que ambas trabajan como relaciones públicas, Guillaume Riche que es un hombre guapísimo y encantador, pero que también se hace el loco cuando quiere y que no deja de meterse en miles de problemas que hacen peligrar su lanzamiento musical al mercado anglosajón, situaciones incómodas que Emma tiene que salvar como sea inventando todo tipo de excusas y mentiras para justificar el comportamiento de Guillaume, aunque Gabriel , uno de los reporteros que siempre cubren dichos incidentes y que parece tener cierta enemistad con el cantante , no se lo pone nada fácil, sobre todo cuando empieza a sentir cierto cosquilleo cuando está con él.

Parece interesante pero a mi no me llegó a atrapar y al final lo terminé un poco de mala gana. Está narrado por Emma en primera persona, la protagonista a la que vapulea su prometido, su hermana y sus amigas, y que se deja llevar fácilmente por Poppy y Guillaume, por momentos  me parecía un personaje con poca personalidad a la que parece que tienen que dirigir en todo momento,luego están  personajes como Poppy que me pareció un poco petarda al principio, o Guillaume que me irritaba bastante pero otras era un personaje peculiar y alocado, el único que se salva un poco es Grabriel, pero tampoco es que tenga un papel estelar.

Resumiendo, no es mal libro , tiene momentos simpáticos y disparatados y para pasar un rato no está mal, entretiene con una historia ligera y rápida, seguramente no me ha gustado más, porque como dije, no soy muy aficionada a este tipo de lectura.

Bueno, raspadito.