Nora Roberts - Entre tú y yo

Crítica realizada por Irdala

Phillip Kincaid es un director de cine que busca un escenario natural para rodar su película. Como no lo encuentre pronto, va a tener que usar un decorado y esa posibilidad no le gusta nada. Conduce su fantástico coche por una carretera interminable y polvorienta a más de 130 Kms. por hora, hastiado, aburrido y enfadado porque ve que no va a dar con lo que está buscando. Necesita hallar un lugar sucio y desalmado de donde parezca que todo el mundo quiere marcharse para no volver.
El ayudante del cheriff ha hecho un alto en su trabajo para tomar una cerveza, mientras sueña con la posibilidad de que en ese pueblo dejado de la mano de Dios, suceda algo más interesante que una simple riña entre vecinos. De repente ve pasar un coche (¡un maravilloso coche!) a mucha más velocidad de la permitida, y va tras él. Cuando intenta sancionar a Phillip, éste, cansado y enfadado como está, se niega a pagar la multa y el ayudante del sheriff se ve obligado a llevárselo detenido.

Cuando llegan a la comisaría, entra en escena Victoria Ashton, la sheriff del pueblo, que ante la testaruda negativa al pago de la multa por parte de Phillip, decide darle "hospedaje" en una de las celdas.
Victoria, desde el mismo instante en que ve a Phillip, sabe que se trata del prestigioso director de cine, sin embargo, en ningún momento demuestra que lo reconoce y desde luego, no tiene ningún trato de favor con él, sino más bien todo lo contrario.

Ella es una abogada de cierto prestigio que a la muerte de su padre, quien fuera el sheriff de ese pueblo, decide hacerse cargo por seis meses de la comisaría de su padre. Tiene sus motivos emocionales para volver al pueblo y ocupar ese puesto.

Estando encerrado en la celda y mirando tras la ridícula ventana, Phillip se da cuenta de que ese inmundo pueblo es el escenario que andaba buscando.

A partir de aquí comienza Entre tú y yo, una corta novela escrita por Nora Roberts en 1984, sencillita, bastante simple y con unos protagonistas que apuntan maneras de lo que después ha hecho con sus hombres y mujeres esta autora. Sin duda Phillips es un hombre encantador, quizá un poco "crudo" todavía comparado con lo que después ha conseguido hacer la señora Roberts de sus chicos. Victoria es... a mí me ha parecido bastante odiosa. Lo cierto es que he sentido bastante rechazo por ella desde la primera página. Es posible que así como Phillip se le quedó "crudo", Victoria se le haya "cocido" de más.

La novela es entretenida. Da para poco más que para pasar unas pocas horas tumbada cómodamente en el sofá con una mantita por encima en estas tardes de frío invierno. Una vez terminada se olvida y punto. No hay nada memorable en ella.

Así que, entre tú y yo, si no eres coleccionista de todas las obras de esta autora, si no la lees no te pierdes nada. Ahora bien, si eres fan de Nora como yo, imagino que no la dejarás pasar.

Crítica realizada por Luciago

¡Cómo puedo llegar a disfrutar con cada nuevo libro que leo de Nora Roberts! Es igual el tema que sea, en este caso trata de un director de cine y de una abogada que está ejerciendo de Sheriff en un pequeño pueblo de Nuevo Méjico.

En principio es realmente divertido, tanto los diálogos como las situaciones me han hecho reírme casi a mandíbula batiente. Me imaginaba al aristocrático director encañonado por la estupenda sheriff y con la cara de pasmo del ayudante y es que no podía parar de reír, pero la trama ha seguido hacía adelante, complicándose un poco con la intervención de más personajes y el añadido de los sentimientos de esta pareja tan extraordinaria.

Los dos son personas con un carácter fuerte, que saben lo que quieren de la vida, seguras de sí mismas, atractivas y con un trabajo que adoran y que es lo principal en sus vidas. Ambos se sienten atraídos físicamente por el otro y deciden que ese verano van a tener una aventura, pero... el que juega con fuego, es posible que se queme... Así que al final, cuando interviene el corazón, todas las palabras que dijeron al principio y todos los planes que hicieron empiezan a tambalearse...

Pese a que es una novela muy divertida, llena de buenos y chispeantes diálogos, como nos acostumbra Nora Roberts, es también una historia intensa, en sentimientos amorosos, entre ellos dos como pareja y también Tory, tiene que solucionar un problema de su pasado.

Hay muchos personajes secundarios que me han gustado mucho, entre ellos el ayudante de la sheriff y el muchacho al que ella ayuda, por nombrar alguno, pero todos perfectamente retratados, por otro lado, como siempre.

La ambientación es perfecta, el pequeño y miserable pueblo, sucio, lleno de polvo, pero con un paisaje que sus pobladores aman y recuerdan cuando están lejos de él.

Una trama que empieza bien y va creciendo en acción e interés, con una buena prosa, ágil, ya conocida por todas sus seguidoras, entre las cuales me incluyo, llena de risas, ternura, amor, sensualidad y con un final, rápido, pero feliz.

Recomendable para una tarde de asueto.