Sherryl Woods - Romance en la bahía

Crítica realizada por Rosamoni

Ahora que Jess O'Brien estaba lista para compartir su futuro con un hombre, sus amigas la convencieron para registrarse en un servicio de citas, ¡pero no recibió pretendientes! El responsable de ello era su amigo de la infancia y psicólogo Will Lincoln, que ya había elegido al hombre perfecto para ella: él mismo.

Will había amado a Jess prácticamente desde siempre. Conocía sus defectos y su fuerza, pero a pesar de su sinceridad y de su encanto, Jess temía que la viera como un caso de estudio psicológico más que como a una chica. Con su familia y el pueblo de Chesapeake Shores detrás, Will finalmente dejó claro lo que sentía, pero ¿era suficiente para convencer a Jess de que corriera el riesgo de su vida?

La ultima entrega de la familia O'Brien ahora es el turno de conocer la historia de la menor de esta divertida familia Jess O'Brien.

Jess siempre ha tenido un trastorno y es el déficit de atención, nunca se ha centrado en nada, siempre iba revoloteando como las mariposas de una cosa a otra, pero cuando le dejaban de interesar las abandonaba y olvidaba para siempre, hasta que encontró algo que desde siempre la habia ilusionado, crear el pequeño hotelito de sus sueños, sobre la bahia, y aquel caserón gracias a su teson ahora se ha convertido en todo un negocio, pero aunque este sueño ocupa una gran parte de su corazon necesita algo más y es encontrar a la persona que la quiera como es, que la acepte con sus virtudes y con sus defectos, y que llene el vacio que dejo el abandono de su madre cuando solo tenia siete años y el alejamiento de su padre, ¿quién le iba a decir que esa persona siempre habia estado más cerca de lo que habia pensado?

Will siempre ha estado enamorado de Jess desde que tenia catorce años, al ser el mejor amigo de sus dos hermanos se le ha considerado parte de la familia, y junto a ellos ha pasado dias maravillosos, en los que observaba a Jess y soñaba un futuro juntos, pero ella nunca se ha fijado en él, salvo como el amigo de sus hermanos, siempre discutiendo ya que él es psicologo y ella tiene un trastorno de déficit de atención piensa que él la está psicoanalizando y no es así ya que él es la unica persona que la acepta tal y como es, para él ella es la mujer de sus sueños ¿pero para ella será solamente un amigo o podra ser algo más?

Vamos a ver gustarme me ha gustado pero tambien me ha decepcionado, de toda la serie es el más flojo, o quizas me esperaba mucho de los protagonistas y por eso me ha sabido a poco, y es que Jess tenia mucho potencial y Will igual pero para mi no ha sabido sacarle partido.

Por un lado ella me ha puesto de los nervios porque me ha parecido muy egoísta, vale que tiene un transtorno por el déficit de atención y vale que sus padres la abandonaron pero no por ello el protagonista tiene que arrastrarse y ver bien todo lo que hace y dejar todo de lado para que ella se sienta segura, me ha gustado mucho Will, dulce, tierno, comprensivo, detallista y romantico pero llega un momento que te dan ganas de darle un capon y decirle "mandala a la porra..." porque sino tu vida sera siempre un sin vivir, es decir, que la relacion es tan egoísta por parte de ellas que en el fondo no veo creible el "y fueron felices y comieron perdices...", porque la protagonista entre su trastorno y el trauma por el abandono quiere que él siempre este disponible para cuando ella lo necesita y si ella se olvida de él o no lo tiene claro pues no pasa nada hay que comprenderla y aceptarla como es, pues no, lo que da la impresión es que ella es egoísta y se ampara en eso para siempre salirse con la suya y que todo el mundo la disculpe.

Por lo tanto la historia de los dos protagonistas no me ha llegado incluso yo hubiera preferido que él la mandara a freir espárragos, porque si una mujer da con un hombre asi que encima siempre ha estado enamorado de ella desde que era una adolescente, que la adora, que le da su espacio y la comprende y ella hoy si, mañana no, y un no sé pues como que acaba enfadandote.

Personalmente, me ha gustado mucho más la historia de Connie y Thomas, un amor en la madurez, no es un flechazo aunque tambien fue conocerse y atraerse, pero se han ido conociendo mejor, poco a poco, dandose tiempo al tiempo, y al final se dan cuenta que deben darse una oportunidad aunque para ello deban enfrentarse a todos. La autora trata el tema de las segundas o terceras oportunidades de forma genial, el miedo de Connie, después de toda una vida dedicada a su hija y a su hermano, a volver a abrir su corazon y que le vuelvan a hacer daño pero ella sabe que vale la pena arriesgarse.

Como en las demás historias sale toda la familia al completo y seguimos viendo como evolucionan, introduciendo nuevos detalles que te intrigan para futuras historias como es el caso de Abby ¿se atreverá a tener otro hijo o su pasado todavía le pasa factura?, y ¿qué pasará con Mick y Susie?, la verdad, es que aunque está historia no me ha acabado de gustar tanto como las otras estoy deseando leer la siguiente, y es que esta familia es divertida, original, pero sobre todo es una familia unida, que juntos afrontan los problemas y juntos intentan solucionarlos.

Una historia sencilla, fácil y rápida de leer, que te transporta de nuevo a la bahía, a esa pequeña comunidad donde te sentirás bienvenido y parte de ellos.

Valoración: del 1 al 10 le doy un 6