Susan Andersen - Llamas de pasión

Crítica realizada por Katon

Aunque hacía años que Macy O’James no iba a Sugarville, todo el mundo recordaba lo que había hecho. Ese pequeño pueblo aún no había podido olvidar su supuesto crimen y que consiguiera irse sin castigo.
Cuando Macy volvió allí para ayudar a su familia, decidió hacerlo con la cabeza bien alta, sobre todo cuando llegó el día de la reunión de antiguos alumnos de su instituto. En lo que no quería ni pensar era en el hecho de que el hombre más atractivo del pueblo quisiera salir con ella. Aunque Gabriel Donovan, jefe de la brigada de bomberos, y ella generaban suficientes chispas para quemar todo Sugarville, Macy tenía muy claro que no era su tipo, pues se trataba de un hombre recto, serio y cumplidor de la ley.
Pero cabía la posibilidad, por pequeña que fuera, de que Gabriel consiguiera hacerla cambiar de opinión.

Desde hacía diez años las visitas de Macy eran cortas y generalmente pasaba todo el tiempo en la posada que regentaban sus tíos. Pero ahora ha llegado para pasar una temporada. Su prima Janna fue atropellada, aunque solo tiene una pierna rota necesita ayuda para moverse y que alguien se ocupe de su hijo Tyler de nueve años. Cuando tiene que ir al pueblo Macy se disfraza tanto por dentro como por fuera, con extravagantes pelucas, ropa muy llamativa además de crear una coraza en la que ningún insulto puede penetrar. Mientras que con su familia es una mujer alegre, dulce y atenta. Pero Macy sabe la reputación que tiene en el pueblo desde que en el penúltimo año de instituto uno de los chicos propagara que era una chica fácil, sumado a un trágico accidente unos meses después provocó que todos le dieran la espalda y se burlaran de ella. Ahora regresa a su hogar tras una carrera de éxito como actriz de vídeos musicales, aunque ahora esté detrás de las cámaras dedicándose a crear dichos vídeos, en Sugarville aún la recuerdan como la actriz de algunos de los vídeos más famosos del país.

El jefe de bomberos de la localidad, Gabriel Donovan, conoce la reputación de Macy, por eso cuando la ve por primera vez en la autopista piensa que es posible que los rumores sean ciertos. Tras trabajar varios años en Detroit se mudó a Sugarville donde dirige a un grupo de voluntarios. Su infancia estuvo marcada por una madre inmadura que no dudó en abandonarle cuando aún era muy joven. Tras una adolescencia un tanto desenfrenada, decidió cambiar su vida gracias al apoyo de un trabajador social. Ahora es un hombre adulto, serio, fuerte, apuesto y que mantiene una relación con Grace, la profesora del colegio local. Aunque ambos se han dado cuenta que su relación no va a ninguna parte. Hasta que termine de construir su casa, Gabriel reside actualmente en la casa de huéspedes de los tíos de Macy. Comprobará con sus propios ojos el cambio que sufre Macy cuando va al pueblo. Se disfraza de una mujer totalmente distinta; segura de sí misma, no le importa la opinión de la gente y es amable con la gente que alaba su trabajo en los videoclips, pero no se siente segura y eso se nota en la tensión que la rodea.

La relación entre Gabriel y Macy no empieza con buen pie. Los prejuicios de él chocan contra la coraza de ella. Tampoco mejora la situación que cada vez que hablen acaben discutiendo. La actitud de Gabriel no es la adecuada y aunque se arrepiente no terminan de aclarar las cosas, pero la atracción surgió desde el principio, y aunque ninguno de los dos la entiende no pueden ignorarla. La llegada de Jack, un famoso cantante de rock y amigo íntimo de Macy, revolucionará al pueblo y a la recatada Grace.

Creo que lo peor de este libro es que el argumento está muy visto, una joven que por mentiras se convierte en una paria social, un accidente de tráfico y los cotilleos de un pueblo pequeño. Aun así me ha gustado la actitud de la protagonista frente a los comentarios de algunos de los vecinos y cómo es en realidad con su familia. Creo que, tanto Gabriel como ella, son demasiado testarudos en algunos momentos y por eso chocan con tanta frecuencia. La relación entre ellos no me gustaba demasiado al principio, la veía mucho más sexual que sensual, pero gracias a unas cuantas manos de pintura, ambos se relajarán cuando están solos los dos y crearán situaciones más parecidas a las de cualquier pareja. Pero todavía les queda mucho que superar. Los secundarios que más me han gustado han sido Jack y Grace, creo que son dos polos opuestos que le han dado un toque de humor a la novela.

Se deja leer, no es una gran historia, pero me ha hecho pasar una tarde entretenida. Me ha enganchado desde el principio, la autora ha entrelazado bastante bien las distintas subtramas de la novela, consiguiendo una historia algo simple pero adecuada para una tarde de lectura.