Terri Brisbin - La prometida sin nombre

Crítica realizada por Mc2

Catherine de Severin no tenía nada que ofrecer a un posible esposo, ni poder ni tierras. Una huérfana pobre y con un pasado oscuro no era en absoluto la mujer adecuada para un conde destinado a controlar un enorme patrimonio. Pero Geoffrey Dumont no le importaba nada de eso, y estaba dispuesto a desafiar a quien fuera necesario, incluyendo el rey, para poder estar con su bella Cate. Privada de la posibilidad de casarse y confundida por los recuerdos, Catherine de Severin no tuvo más remedio que aceptar su triste destino. Hasta que apareció Geoffrey Dumont y puso todo su mundo del revés...

Tercer libro de la serie Honor y Pasión, ambientado en Inglaterra a finales del siglo XII. En esta novela nos encontramos como protagonistas a Catherine de Severin, hermana de William, el protagonista de La novia del normando, y Geoffrey Dumont, hermano de Christian Dumont, el personaje principal de La esposa de Dumont.

Catherine esperaba con ansiedad el retorno de su viejo amigo Geoffrey Dumont. Como prima lejana de Emalie, esposa de Christian Dumont, realizaba visitas frecuentes a Greystone. Los momentos que allí había pasado, junto al hermano del señor, habían dejado huella en ella. Sin embargo, sabía que Geoffrey acudía allí por última vez con una idea en mente. La de tomar esposa, y ella no podría ser nunca su esposa. Cuando se marchase de Greystone con la dama elegida ella regresaría por última vez al convento para tomar los votos.

Geoffrey Dumont estaba deseoso de llegar a casa. Puede que fuera la última vez que pudiera ver a su fiel amiga. Con una riqueza y un título a heredar, en un corto plazo de tiempo, se veía con la necesidad urgente de tomar esposa. Pero pese a amar de una forma u otra a Catherine sabía que no podría casarse con ella, de la misma manera que tenía sus dudas en cuanto a su capacidad para gestionar las tierras de Langier. Además, de intentarlo, nunca recibiría la aprobación de Christian.

Pocos saben la verdad sobre los orígenes de la joven. Christian juró protegerla ante su hermano, William de Severin, y pocos saben la verdad sobre su verdadero apellido. Pero cuando los hombres de Evesham, amigo íntimo del príncipe Juan la reconocen, su vida pasará a correr peligro. Sobre todo porque fue algo más que un rehén en las maquinaciones de este pérfido personaje.

Tras conocer la verdad sobre Catherine, Geoffrey desea más que nunca casarse con ella y alejarla del príncipe Juan, algo a lo que no está dispuesto Christian que sabe a lo que podría enfrentarse su hermano. Pero una misiva del rey Ricardo podría facilitarle al menor de los Dumont la libertad de elegir a su esposa, manteniendo las propiedades y el título que en teoría no hubieran debido corresponderle como segundo hijo.

Esta nueva novela de la serie Dumont tampoco me ha defraudado. Prácticamente la he leído de un tirón. A parte de la trama central, en torno a la elección de una esposa adecuada, la autora crea una cierta intriga sobre lo sucedido con la joven durante su cautiverio. Es de agradecer que no de muchos datos sobre la perversidad del príncipe Juan porque con las insinuaciones basta para suponer que tipo de juegos podría desear este individuo con una joven de quince años, y los horrores a los que tuvo ella que enfrentarse. Los actos de Geoffrey también provocaran un distanciamiento entre Christian y Emalie que marcan parte de la novela. Aunque, como el hermano protector que siempre ha sido, acudirá a la corte para estar junto a él de ser necesario.

La valoro con un 4/5.