Como autor, tal vez nunca antes hayas oído hablar de la "ilusión de verdad", pero seguro que como lector la has experimentado de primera mano en más de una ocasión, ya que es un concepto que está presente en toda historia de ficción. La "ilusión de verdad" hace referencia a ese compromiso implícito que se establece entre el lector de una obra y su autor, de tal forma que el primero se compromete a creer que todo lo que el narrador cuenta está sucediendo realmente más allá de las páginas, y el segundo se responsabiliza de poner los ingredientes necesarios para que eso mismo resulte verosímil y fácil de creer. Para que esa "ilusión de verdad" se mantenga, por lo tanto, será imprescindible llevar a cabo una documentación eficaz, es decir, recabar información específica sobre la situación que queremos contar con el fin de que resulte creíble. Aunque no se llegue a utilizar toda la documentación recogida (algo que no solo sería imposible, sino, incluso, contraproducente), es indispensable que nos convirtamos en expertos en nuestra propia historia y que lleguemos a conocer a fondo el mundo que estamos construyendo ante los ojos del lector.
La documentación también forma parte de la tarea de escribir una novela, por lo que es necesario afrontarla de un modo inteligente que nos permita optimizar el tiempo de que disponemos, así como los recursos a los que podemos acudir: libros y revistas de divulgación; bibliotecas, museos y archivos; buscadores online; embajadas y consulados; entrevistas a personas reales o contacto con expertos en una determinada materia; visitas in situ, etc.
Hay que ser perfeccionistas y exhaustivos en nuestro trabajo, pero siempre sin que ello nos impida avanzar y termine por sobrepasarnos. Dice Francisco Castro que es necesario buscar datos de una forma práctica: en función de la literatura, de la historia que queremos contar. Al escritor tienen que importarle los datos, pero solo hasta donde le importan a la literatura, y a veces, de hecho, convendrá modificar o ignorar determinados aspectos si vamos a estar seguros de que la historia saldrá ganando con dichos cambios ―lo que se conoce comúnmente como "licencias literarias"―. En narrativa de ficción, mucho más importante que decir la verdad es que el lector se crea que aquello que narras es verdad. En otras palabras, que se mantenga la "ilusión".
También hace falta tener muy presente que la documentación por sí sola no sirve de nada. Una acumulación de datos fríos, sin moldearlos en consonancia con la emoción que debe destilar toda novela, resultará vacía y llegará a despistar y a aburrir a los lectores. Es decir, que una información verídica solo será de utilidad cuando se viva y se sienta como lo hace un determinado personaje, o cuando se escriba desde la verdad de nuestro propio corazón.
Algo similar sucederá con los escenarios. No importa que no conozcamos en vivo los escenarios a través de los cuales se mueven nuestros personajes: si estos están bien elegidos, si nos documentamos de forma adecuada y, sobre todo, si los integramos bien en el ensamblaje emocional de la novela, los escenarios acaban por favorecer que se cree una sinergia especial entre lugar, protagonistas y trama, casi como si cumplieran, por sí mismos, las funciones de un personaje más.
Realizar un análisis previo y detectar las necesidades derivadas de la obra que tenemos entre manos es una buena manera de centrarnos y acometer la documentación de forma eficaz. Para encontrar aquella información exacta que andamos buscando vamos a tener que leer muchas cosas que no nos van a ser útiles, por eso hay que saber cribar. La documentación es un proceso arduo y difícil, pero no perdamos de vista que, ante todo, su objetivo es servir de apoyo al arte.
Recuerda que puedes iniciar tu formación hoy mismo en el
Curso Estándar de Creación de una Novela Romántica que imparte Érika Gael a través de
ESCRibir ― Formación Literaria.
Más información en http://comoserescritor.com
Copyright © 2002 - 2022 rnovelaromantica.com y elrinconromantico.com
| Aviso legal | Política de privacidad | Política de Cookies |
Comentarios (2)
Katon
Gracias por otro de estos artículos que nos hacen pararnos y pensar!!
responder
Malory
responder